Historias de hospitalEsta semana todo se ha truncado, un dolor incesante de cabeza, cansancio. Una semana de hospital como acompañante entregado y sujeto no paciente. Justo después de aquel breve comentario del martes surgió todo como una reacción en cadena: visita al médico, hospitalización y noches en vela. Visitas fugaces al trabajo después de una noche de insomnio, acostado en un sillón extensible, acalorado y descuidado. Pese a todo no he podido evitar hacer una incursión (breve) diaria para permitirme practicar mi costumbre aeróbica: correr para desahogarme, eliminar toda la tensión y las toxinas de las horas de “hotel”.
Sin grandes alarmas pero a la expectativa, con miedo y tensión, ha sido una secuencia interminable de pruebas (lentas) y estudio de evolución, a un ritmo que nunca he entendido del todo. Como se dice, los asuntos de palacio van despacio, los de la salud más.
Sólo me puedo permitir ofrecer esta versión personal de una receta clásica, el llamado Zucchini Bread, que no es otra cosa que un pan dulce de calabacín, para mí cake. Este cake está a medio camino entre los clásicos panes dulces de tradición norteamericana y los cakes más europeos. Como tales, me gusta usar harina de repostería o mezclarla a partes iguales con harina normal, no sólo con harina de media fuerza (“all purpose flour”, “plain flour”). El sabor que le da el calabacín no es tan intenso como puede serlo en las versiones de plátano o el de calabaza, sin embargo, hay algo que lo hace diferente, y con chocolate todavía mejor (para mi gusto).
Por el gusto, sorprenden sus sabores: canela, calabacín, chocolate y vainilla, nada perceptibles por un visionado de las fotos a simple vista, hay que probarlo. Es suave, nada seco, de sabor agradable. Con algunos fragmentos me he permitido realizar unos pasteles rellenos de una crema suave. Si vuestra tensión os lo permite, tomaos un buen té o café… Mi tensión ahora está por las nubes, me lo tomaré solo, acompañando a Noa en esta larga espera.
La planta de urgencias es más fría, los suelos están pintados con líneas y flechas de colores que indican direcciones, cual pasos de baile. Azul-izquierda, “Admisión urgencias, Salas de espera”, “ingresos”; unos metros más adelante, verde-izquierda, “sala raios”,…; rojo-derecha, “observación”, “control B-C”;…
Desde “Admisión urgencias” volvemos sobre nuestros pasos, ahora acompañados, para cambiar el sentido de la marcha, dirección derecha, línea roja. La acompañante, cuyo color de bata desconozco, nos dirige a un ascensor para el que es necesario una llave de acceso. Planta cero. La espera se hace indeterminada en el tiempo, podrían haber pasado minutos o casi una hora, parece una eternidad. ”Está bien, no se preocupe. La tensión ha bajado cuatro puntos.”.
(…)
Ya han pasado varios días (3) y todo sigue igual de lento, a la expectativa. Abstraído en un mundo extraño y confuso, lejos queda la esperanza de unas vacaciones relajadas. Por el momento seguiré aquí, sin noticias, dentro del mundo insomne, de sueros, curas, ropa amarilla, verde y blanca. Respuestas secas e preguntas curiosas, cansadas de responder siempre a las mismas. No existe una FAQ a la que echar mano, sólo unas pocas (sólo he visto mujeres) responden con cortesía, otras con indiferencia y las restantes con una gesto de “dejadnos hacer nuestro trabajo, pesados”.
Las de esta mañana-noche han resultado encantadoras...
Durante los tres primeros días hemos tenido mucha suerte con la compañía, tranquila, sin ruidos y de agradable conversación. No siempre ha sido así. Ahora se han ido, por el momento la cama anexa está vacía, recién hecha, con una almohada y unas toallas, esperando al/a la nuev@ paciente. Quizás cuando acabe de escribir estas palabras ya haya compañía, visitas y más visitas. La visita perfecta es aquella que dura sólo unos minutos, los justos para sentirse apreciado y lo suficientemente cortos como para no resultar pesados y cansinos.
A las siete de la tarde dormía, soñaba con intensidad, como esos detergentes o suavizantes ultra-concentrados, unas pequeñas dosis son más que suficientes. Las luces apagadas, solos Noa y yo, como en casa. Una visita repentina me despertó en un estado de confusión. Aturdido por el lugar he tenido que pensar durante unos minutos… como cuando de pequeño me despertaba de una siesta sin saber dónde estaba. Había perdido mi lugar en este mundo. Me imagino así la muerte, como una pesadilla y un despertar confuso. Sólo que sin despertar.A partir de la planta baja, recepción, el nivel de esperanza decrece con la altura. Las dos primeras con llantos de niños y caras de felicidad, unas plantas más arriba los lloros no son de alegría, amargos e impotentes esperando un verdadero milagro.
Este breve puente ha sido una pequeña escapada, breve pero intensa. Esperaba que la vuelta me llenase la cabeza de pequeños recuerdos e imágenes, ahora, cansado, sólo veo sábanas blancas y miradas ojerosas.
Sólo esta breve reseña hasta una deseada vuelta a casa. Volver a dormir en aquellos 200x180 m2 y dejar de retorcerme en un sillón extensible.
Soñad por mí.
Ingredientes- 60 gr. de nueces troceadas.
- 50 gr. de chocolate negro al 70% troceado.
- 270 gr. de harina [*]
- 12 gr. de cacao en polvo.
- 1 cucharilla de té (escasa) de sal fina.
- 1 cucharilla de té de bicarbonato sódico.
- 1 cucharilla de té de levadura química (Royal)
- 2 cucharillas de té de canela en polvo.
- Una pizca de jengibre molido (opcional)
- 2 huevos grandes (120 gr.)
- 155 gr. de aceite de oliva.
- 12 ml. de extracto de vainilla.
- 300 gr. de azúcar.
- 155 gr. de calabacín rallado.
(1) Troceamos las nueces y el chocolate. Reservamos. Mezclamos la harina con la sal, el bicarbonato, la levadura química, la canela y, si usamos, una pizca de jengibre molido. Precalentamos el horno a 170º C. En un cuenco grande batimos los huevos con el aceite, la vainilla y el azúcar hasta blanquear. Añadimos la mezcla de harina y seguimos batiendo. Por último incorporamos el calabacín rallado, las nueces y el chocolate troceados.
El calabacín se debe rallar relativamente fino, no pastoso, rallado.
(2) Engrasamos y enharinamos un molde para cake, vertemos la masa hasta unos ¾ de altura (para que no rebose) e introducimos en el horno precalentado durante unos 45 minutos a 1 hora (más bien una hora), justo hasta que al pinchar en el centro con un cuchillo o brocheta, salga limpio.Al hornearlo, para que se haga de modo uniforme, es mejor ponerlo sobre una rejilla y no una bandeja. Al retirarlo, para que no siga cociéndose (debe estar hecho), lo podemos poner en un baño de agua fría.
Desmoldamos e introducimos en el frigorífico para que gane sabor. Antes de consumir espolvoreamos con azúcar glasé.
El dulce porvenir es difícil
Soñaré por ti y contigo para que te sientas acompañado y arropado por los que en este blog hemos encontrado un amigo. Espero que todo salga bien y que la estancia en ese "hotel" sea la estrictamente necesaria, ni más ni menos.
ResponderEliminarMuchos besos.
Mado.
Hola Harry:
ResponderEliminarQué bien que estés de vuelta. Ojalá que esos dolores de cabeza (de M?) sean sólo consecuencia del stress. Las migrañas por tensiones cervicales son bastante habituales.
Bueno, sigo analizando la receta. No me convencen demasiado los calabacines, pero tengo una amiga especialista en cocina sefardí que hace una torta muy parecida a tu cake, y siempre me habla de las bondades del calabacín para los dulces. A lo mejor me animo a usarlos esta vez.
Saludos afectuosos reparadores para todos vosotros.
Me alegra que vaya mejor, espero que no sea nada importante y el pronto regreso a casa.
ResponderEliminarQue original la mezcla de calabacin y chocolate, seguro que esta delicioso.
Besos.
Ánimo, piensa que todo paso por hospitales es pesadísimo pero pasajero.A cuidarte a cuidar mucho al enfermo y acompañarle al máximo y mirando hacia adelante, pronto estareis en casa!!!!
ResponderEliminarY aún has tenido ganas de ponernos una receta, además tan suculenta como esta!
Estamos con vosotros,
un besote
Dolça
Yo tambien quiero acompañarte en estos dias dificiles.
ResponderEliminarEspero que "el paciente" se recupere lo antes posible, mientras tanto recibe mi cariño y apoyo. Aunque lejos, estoy a tu lado.
Ánimo Harry. Tranquilo, que las cosas siempre es peor imaginarlas que pasarlas. Nos da más miedo lo desconocido.
ResponderEliminarEspero que tengas suerte con las compañías de hospital, que son un componente importante en la estancia. Llévales un trocito de cake y te tratarán como a un rey.
Que se mejore, de corazón.
Por cierto, tenemos la misma medida de cama! bueno, la mía algo más grande: 2,10m x 1,80m. Pero es que no somos pequeños ninguno..... BEsos. OLGA.
Animo Pepe. Parece que lo peor ha pasado.
ResponderEliminarEstamos contigo enviándoos nuestra energía positiva para que todo salga OK.
Los hospitales "queman" mucho, y los fines de semana mucho más. Así que paciencia. Tú eres sabio y lo podrás llevar.
¿Una cama de 2 x 1'80? Jolines, sí que eres grande. ¿no necesitas GPS para encontrar a Noa?, ;-)))
Muacs para ese acompañante que se retuerce en un sillón. Ayyy cuando llegues a casita!!!
Animo al cubo
Solo mandarte mi cariño y aliento (me pasa como en los entierros, nunca se que decir...), espero que todo mejore poco a poco y que solo haya sido un susto. Mientras tanto, nos tienes a nosotros aquí pa lo que sea.
ResponderEliminarBesos. Ruth
Espero que estéis bien y solo haya sido un mal momento.
ResponderEliminarBesos.
Como me gustaria saber espresarme igual q tu,pero no es ai por eso solo quiero dejarte un animo y buena suerte,deseo de corazon q todo salga bien.Pocas son las veces q te dejo un comentario pq la verdad siento un poco de verguenza primero por salir como anonimo y segundo pq creo q la mayoria ya sois como una gran familia y me siento un poquito intrusa,pero que sepas q no hay ni un solo dia q entre en internet y no entre en tu maravilloso blog,te tengo un gran respeto por todo lo que escribes y tb admiración me encantan tus recetas ya he hecho varias y siempre con exito,por todo ello te doy las gracias en los momentos bajos leerte me hace sentir un poquito mejor y acompañada ya ves haces una gran labor,cuando te han criticado me he cabreado,y cuando alguna vez he leido que lo ibas a dejar me he sentido triste y mas sola por todo esto GRACIAS y seguro q todo saldra bien.Q petarda soy me estoy liando de mala manera,lo siento un millon de bicos dende moi ceca de ti dende as preciosas rias baixas RI
ResponderEliminarVaya, Pepinho! Espero q estés bien y q 'Noa' esté ya recuperada cd leas esto. Como ya te dijeron más arriba, las migrañas por tensión son frecuentes, espero q sólo sea eso.
ResponderEliminarComo enfermera 'eventual' q anda de servicio en servicio (he pasado por muchos, plantas de cirugía, medicina interna, urgencias de adultos, urgencias de niños, plantas de pediatría, de hematología, UCI, salas de reanimación...), sigo sintiéndome impotente por aquel personal q, en este trabajo, se dedica sólo 'a lo suyo', a hacer determinada técnica o papeleo sin darse cuenta de q una persona está ahí, esperando una explicación, una palabra comprensible... una sonrisa. Y me da rabia cuando me agradecen el trato q les doy por lo q yo considero 'ser humana y ser profesional. Bueno, q me lío. Es q me fastidian todas las personas q afean nuestra profesión tan bonita.
Lo dicho, te mando un millón de kilotones de energía!!
Hola:
ResponderEliminarMucho ánimo, las estancias en ese tipo de "todo incluido", cuanto más breves mejor, las horas allí son interminables...un día en un hospital es eterno...para el paciente y para el acompañante, y no digamos las noches...ufff!!!!cómo te entiendo!!! Te mando todo el apoyo moral del mundo, por si vale de algo.
Bicos e apertas. Ana.
Bico
Gracias,
ResponderEliminarTengo que volver al "Gran Hotel", dónde M tiene la pulsera de todo incluido con un código de barras.
Para salvaguardar su intimidad y la nuestra, liberarnos de esos que se atreven a juzgar, no entraré en detalles. Sólo decir que todo va mejor y que muy pronto esperamos volver a casa.
Allí hay todo tipo de personas y, como en la vida, muy buenas, buenas, regulares y menos buenas. Estos últimos días hemos tenido mucha suerte.
En el fondo TODO EL MUNDO ES BUENO, sólo hay que descubirlos.
Nuestra cama es como una vuelta doble de hojaldre: la pliegas en cuatro partes y, al final, yo me quedo con una, 45 cm de ancho.
Un beso muy grande. Gracias.
Pepinho.
El dulce porvenir.
Hola!!! Soy Miriam, hace poco te comenté, "xinita sintetica". Al final me decidí, hice el cake de calabaza... Increíble que me saliese bien! Aunque seguro que nada que ver con uno hecho por tí, fue protagonista mientras duró jajajajjaja.
ResponderEliminarQuería comentarte porque en vez de cocer la calabaza o hacerla al horno la hice al vapor, tardé menos que horneándola obviamente, y el efecto creo que puede ser el mismo. Qué te parece? Además, de igual manera que al hornearla apenas absorbe agua :). Correcto?
^^
Espero que estès bien y M tambien,que se recupere pronto, cariños, Gloria
ResponderEliminarPepinho, espero que pronto estéis de nuevo en casa y que todo haya quedado en un susto.
ResponderEliminarMuchas gracias por haberte acordado de nosotros y habernos puesto uno de tus regalos en el blog a pesar de estar con tantas cosas en la cabeza :)
Sobre todo, muchos ánimos y mucha energía positiva. Cuídate mucho, que te echamos de menos :)
Soñaré por tí.
ResponderEliminarLos "grandes hoteles" a veces se hacen absolutamente inhóspitos. Esperemos que la estancia sea lo más corta posible.
La receta, magnífica, como siempre.
Besos
Me sumo a los buenos deseos y mis mejores vibras desde aquí.
ResponderEliminarSeguramente como dice Madame Brioche sean cuestiones propias del estrés (te lo dice alguien que desde hace tiempo padece de esas "nanas" y ya sin tener suerte con que los médicos le den en la tecla). Muchos mimos y cariños seguro que ayudan a una pronta mejoría. :)
Si andas con tiempo y deseas pasar te dejo una receta con Zucchini: http://www.fotolog.com/lady_pixelita/62827244
Aún no he subido unos muffins bien gustosos de calabacín pero cuando lo haga te mantengo al tanto, si lo deseas.
Tu propuesta suena muy tentadora y bien original en la combinación de sabores. Veré de hacerme un tiempito y probar hacerla.
Pepinho, te dejo un gran abrazo cargado de optimismo y buen ánimo para que le transmitas a tu chica.
Cariños, Pia
ups! faltó parte del link:
ResponderEliminara/62827244
y qué tonta... recién leo que vuelven a casa, qué buena noticia! Me alegro mucho por los dos. :) Cuídense, besos.
En fin...soy de las que me paso de mes en mes y a veces no dejo ni un mensaje. No es necesario. Sigo observando que este espacio es impresionante, la gente que te sigue y te quiere.
ResponderEliminarHoy no comento la receta, solo desearte suerte. Los hospitales son tremendos, te lo dice alguien que lleva trabajando +++++ años en ellos. Un desastre de organización a veces pero con buenas personas escondidas. Prueba lo de la sonrisa, funciona. Un beso y que todo vaya bien. y un poco más de paciencia.....siempre un poco más.
^^Shinta
Hola:
ResponderEliminarÁnimo en las que tercian... poco a poco que vaya pasando y todo volviendo a la normalidad...
Bicos!
Me encanta este cake, es uno de los componentes de mi interminable lista de recetas pendientes.
ResponderEliminarEspero que sea quien sea el paciente, todo salga bien y la estancia sea breve.
Un abrazo, Pepinho, y tú dale muchos a M, y que estés por ella, como ya haces, cuídala y cuidaos. Muchos buenos deseos para los dos.
ResponderEliminarY como cuando un invitado te trae a casa un pastel, y le dices que no tenía que haberse molestado pero que muchísimas gracias, te digo que gracias por este cake, en este momento. Me gusta mucho el calabacín pero nunca lo he cocinado en dulce, seguro que lo probaré, me gustan (y me tranquilizan) los pasteles con aceite de oliva en vez de tanta mantequilla.
Que salga pronto el sol y volváis ya al 200x180.
Besos. Y mucho ánimo.
Qué pinta, de este fin de semana no pasa...
ResponderEliminar¿Qué hacer cuando alguien cercano necesita ayuda, y no se la podemos dar?
ResponderEliminarSi pudiéramos compartiríamos con él el dolor, aunque sólo fuese a ratitos, pero eso no es posible.
Sólo cabe decir, "ya, te entiendo, sé por lo que estás pasando", y nos queda la duda, casi certeza, de que eso no le alivia nada.
Tan solo se puede estar cerca, hacer sentir nuestra presencia y ofrecer la poca ayuda que podamos dar.
Y un abrazo de vez en cuando viene bien.
Que los malos momentos pasen pronto.
Esperanza.
Va todo bien?
ResponderEliminarSaludos
Hola Pepinho, como te entiendo.
ResponderEliminarUn dia crucé el charco en pos de un amor que no pudo ser.
Se tornó en un malvado brujo,yo linda princesa abducida siempre por amores "inadecuados" cuando el brujo enfermó la piedad ? no, la culpabilidad se pegó a mi y lo cuidé en dos "hoteles" del tres al cuarto durante 6 meses.
Un día me dije...basta!
Y ese día empecé a ser libre.
Te deseo mucha paz interior para afrontar tu momento.
Un abrazo.
Margot
PD: me ha enamorado este divino cake de calabacín y chocolate.
Un abrazo de fuerza, Pepinho y familia.
ResponderEliminarTe mando cariños pepinho y para M tambièn. Gloria
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